Hoy, de nuevo, Belmez está triste. Una persona joven nos ha dejado, y nos ha conmovido profundamente, ya que él era ese belmezano que siempre encarnó de lleno la palabra amistad y la llevaba en el fondo de su corazón. Son tiempos duros para todos: su familia, su mujer, sus hijos y todos esos amigos que tuvimos la oportunidad de convivir con él. Compartimos muchos momentos laborales y de esa gran afición deportiva que siempre dignificó cuando se ponía la camiseta del equipo de sus amores, el Recreativo Belmezano CF. Desde su posición en el campo, su entrega era total, una lucha sin cuartel, buscando siempre la victoria. Este gran belmezano, Manuel Moreno, conocido popularmente con mucho cariño como Alemán —un apodo que surgió tras su llegada a Belmez durante las emigraciones de aquellos años—, era una persona cercana, siempre al lado de su familia y muy querido en todo nuestro entorno.
Desde estas líneas, quiero expresar mis más sinceras condolencias a su mujer, Antonia Montoro Cabrera, y a todos sus hijos: Manuel, Alberto y Yessica, así como al resto de su familia. Manolo ha dejado una gran huella en nuestro pueblo y en todos los que tuvimos la suerte de conocerlo y tratarlo. Desde mi corazón y el de mi familia, os reitero nuestro más sentido pésame. Le pido a Dios que os ayude a superar este inmenso vacío que vuestro marido, Antonia, y padre ha dejado en vuestra familia y en el corazón de todos los belmezanos, a quienes Manolo siempre regaló tanto cariño.
Un abrazo con todo nuestro cariño para vosotros, Antonia, hijos (Manuel, Alberto y Yessica) y demás familia. DEP, Manolo. Siempre te tendremos en nuestras oraciones y plegarias. Que Dios te abra los brazos y te dé toda la felicidad celestial.
Daniel Solano Sujar
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