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El espíritu festivo volvió a tomar el paraje de Rabogallo en Peñarroya-Pueblonuevo con la esperada romería de San Bernardino, una de las tradiciones más queridas por la comarca, celebrada este jueves 1 de mayo. Desde primera hora de la mañana, los fieles se congregaron para acompañar la imagen del santo en su emotiva procesión.
Como marca la costumbre, la jornada comenzó con la salida desde la barriada de La Estación hacia la Ermita de San Bernardino, donde se celebró la Santa Misa a mediodía. La imagen del santo, cuidadosamente adornada con flores y transportada en una carroza decorada por la hermandad, fue llevada al hombro por cuatro devotos cofrades, despertando la emoción y los aplausos de los asistentes a su paso.
La festividad se desarrolló en un ambiente de fe, tradición y convivencia. Uno de los momentos más esperados fue la barbacoa marinera, donde no faltaron las sardinas, el vino y la cerveza, cortesía de Bebidas Gregorio Fernández. Toda la comarca fue invitada a compartir este momento de hermandad, disfrutando de la gastronomía local en buena compañía.
La música fue protagonista en varios momentos del día, con la animación de los Jóvenes del Guadiato durante la procesión y en la Ermita, y la gran matiné ofrecido por Fran Sensaciones y su mujer, que puso a bailar a jóvenes y mayores.
Además, la jornada contó con el tradicional concurso de caballistas, así como divertidas actividades como el concurso de merengues, pucheros y carrera de sacos, donde las risas y la participación no faltaron.
La celebración fue también un espacio de encuentro entre vecinos y autoridades locales, quienes aprovecharon para compartir con los asistentes y dialogar con los responsables de la hermandad.
Un año más, la romería de San Bernardino ha demostrado ser un símbolo vivo de la identidad de Peñarroya-Pueblonuevo. Que viva San Bernardino, y que viva esta fiesta que nos une cada mayo.
pues a mi las romerias no me gustan creo que es algo un tanto antiguo .Cuando se quiera ir al campo no hace falta ninguna romeria para ir