Vivir apasionadamente nos sienta mal a ti y a mí.
Comprueba con mis manos y tus manos, que aun estando en la cúspide, todavía no hemos tocado techo.
En este cautiverio de laberintos encantados y de oníricas imágenes inimaginables, me siento hoy decido a encadenarme de por vida ante todo mal que hice antes y desatarme y fugarme para todo el bien que llevo haciendo desde hace tiempo.
Un trabajo incalculable de infinitas horas dedicadas en cuerpo y alma a disipar todas las efervescencias de mi enfermedad mental.
¡Hazlo por mí!, no te sientas mal, te pido perdón sí te he ofendido, busco refugio a la orilla de esta tempestad que la calma de mi habitáculo donde me conduce a escribir todas estas bellas frases y palabras.
El destino me dirá sí voy por el buen camino, ese camino de la educación inglesa me lleva a ser puntual con mis artículos.
Artículos que agrandan el alma e intenta paliar mi soledad mental, que no física ni tampoco afectiva.
Una soledad donde los auténticos héroes y Heroínas se encuentran y se cuentan el porqué de su existencia, como sí del mismo cosmos se trátase, me embullo en un espacio infinito y claro de libres estrellas que se esparcen en un futuro firme y convincente para paliar mi soledad selectiva.
Me fijo en el faro que alumbra este mar. Un mar dónde en el fondo de sus vicisitudes, se encuentran los paradigmas reales de la verdadera vida.
Por ello, este primer M’Expreso de febrero, va para decidir cómo quiero vivir: Sí en soledad o en libertad».
M’EXPRESO Y ME CONDENO A CADENA PERPETUA
Y, TÚ, ¿TE EXPRESAS?
¡A QUÉ ESPERAS PARA CONDENARTE TAMBIÉN CON ESTA CÁPSULA EMOCIONAL TRAS LEERLA!
SERGIO DELGADO CINTAS
0 comentarios