Preocupación por la calidad del agua en la Sierra Norte de Córdoba

InfoGuadiato

La situación del agua en la Sierra Norte de Córdoba ha encendido las alarmas entre los vecinos y organizaciones como Andalucía Entre Todos, que denuncian una gestión deficiente y la presencia de contaminación en varios municipios de la zona.

Contaminación persistente y falta de controles

Según Andalucía Entre Todos, los problemas de calidad del agua están directamente relacionados con la contaminación generada por la ganadería intensiva (macrogranjas) y el uso excesivo de fertilizantes en los latifundios, prácticas que han afectado la calidad del agua en la zona durante años. La contaminación acumulada afecta especialmente a los embalses y depósitos, como el de La Colada, que recibe vertidos contaminados sin un control adecuado por parte de las autoridades.

Además, se critica que la Junta de Andalucía no haya tomado medidas efectivas para evitar el deterioro del agua y permita actividades que perpetúan la contaminación. Esta inacción, señalan, pone en riesgo la salud de las más de 80,000 personas que todavía habitan en la Sierra Norte.

Falta de transparencia en los análisis

La preocupación aumenta ante la falta de actualizaciones completas sobre la calidad del agua. En Peñarroya-Pueblonuevo, por ejemplo, el último análisis exhaustivo registrado en la plataforma SINAC del Ministerio de Sanidad data de marzo de 2024. Desde entonces, no se ha publicado ningún informe completo que garantice que el agua cumple con los estándares de potabilidad. “Los análisis parciales no son suficientes, no permiten confirmar si el agua es realmente potable. Es como pasar por alto la prueba del algodón”, denuncian los vecinos.

En otros municipios, como Pozoblanco y Villanueva, los análisis recientes reflejan problemas similares. En Pozoblanco, la concentración de cloratos supera cinco veces el límite establecido por la normativa europea (1,26 frente a 0,25), mientras que en Villanueva también se registran niveles preocupantes (0,63). A pesar de estos datos, el agua sigue siendo declarada apta para el consumo, lo que genera desconfianza en la población.

Imagen tomada el lunes 20 de enero a las 13:30 en el distrito de Pueblonuevo, mostrando la notable turbidez del agua del grifo en ese momento

Turbidez y problemas asociados

En las últimas semanas, los vecinos han reportado que el agua llega con un color oscuro, un aspecto que desalienta su uso para cocinar o beber. Aunque las autoridades insisten en que los parámetros de calidad son óptimos y el agua es potable, atribuyen este fenómeno a la posible presencia de restos acumulados del agua de La Colada que aún podrían estar desprendiéndose de las tuberías debido a los cambios extremos de temperatura.

“Las heladas nocturnas, combinadas con temperaturas diurnas que alcanzan los 15-18 grados, podrían estar provocando desprendimientos en las tuberías, lo que genera esta turbidez ocasional”, explican desde Emproacsa. Sin embargo, muchos vecinos consideran esta explicación insuficiente y exigen medidas más concretas.

Reclamaciones y acciones pendientes

Organizaciones como Andalucía Entre Todos han presentado registros en municipios como Pozoblanco para exigir explicaciones y soluciones inmediatas. En Peñarroya, aunque no se han presentado solicitudes formales debido a la falta de datos actualizados, se insta al Ayuntamiento a realizar análisis completos y transparentes que despejen las dudas sobre la calidad del agua.

Los vecinos piden que se asuman responsabilidades y se afronten las causas estructurales del problema, evitando que estas prácticas dañinas sigan perpetuándose. “Mientras no se tomen medidas para solucionar las causas de la contaminación, seguiremos sufriendo las consecuencias y poniendo en riesgo nuestra salud”, señalan.

La situación exige un compromiso claro de las autoridades locales y autonómicas para garantizar el acceso a agua potable segura y de calidad en toda la Sierra Norte.

En Peñarroya no lo hemos presentado porque no tenemos los datos, pero sí le instamos al alcalde, por ahora, de Peñarroya, antes de la conspiración de las derechas muy rancias, aquellos que se llaman sí, y la tránsfuga de Izquierda Unida, pues cambie el ayuntamiento, para que intente saber qué es lo que está pasando en Peñarroya, por qué no se hace una analítica completa.

La situación, advierten, no mejorará hasta que las autoridades locales y autonómicas tomen medidas para atajar las causas de la contaminación y realicen controles rigurosos que garanticen un suministro de agua potable seguro. «Mientras no se resuelvan estas causas, seguiremos con el agua al cuello, y nuestra salud estará en juego», concluyen.