Cuando eres pequeño y sientes la inquietud de convertirte en futbolista, cuando sigues los avances de la transmisión de tu equipo preferido en esas larguísimas tardes de invierno a través de pequeñas emisoras de radio, comienzas a soñar. Sueñas con el día en que puedas estar compartiendo momentos futbolísticos, jugando en tu barrio y participando en partidos de barriada. Luego, te invitan a hacer la prueba en el Real Madrid, pasas por el centro deportivo de la ciudad deportiva del Real Madrid en la Avenida del Generalísimo y luego en el Paseo de la Castellana, junto al Hospital de la Paz. Ahí, este gran deportista y excelente jugador de medio centro, Toni Grande, dejó una gran impronta durante el tiempo que estuvo en el club. Más tarde, formó un binomio con nuestro seleccionador español, Vicente Del Bosque, siendo compañero suyo en el Real Madrid, y ambos fueron campeones del mundo de fútbol en aquel mundial inolvidable. Toni Grande, ya retirado y cercano, siempre atiende a los aficionados que se acercan a saludarlo. Ahora disfruta jugando al juego del mus y comparte esos momentos futbolísticos que tanto amó y sigue amando. Fue un placer pasar ese rato con él durante mi época como jugador en el CD Fuencarral. Su cuñado Rafa, compañero mío en ese club, me mencionó que él y su mujer, novia de Rafa y hermana de Toni, solían acudir cuando estaban libres a ver los partidos regionales de este equipo. Fue un día y un momento feliz, ya que la conversación fue muy correcta y este personaje fue una persona cercana y muy amable, a quien le agradecí ese ejemplar comportamiento conmigo. Grande como es su nombre, este es Toni Grande.
0 comentarios