El pasado 4 de diciembre, a pesar de las inclemencias del tiempo en Peñarroya Pueblonuevo, el Colegio de Ingenieros Técnicos y Grados en Minas y Energía de Córdoba llevó a cabo una emotiva jornada para conmemorar a Santa Bárbara, patrona de los mineros. Aunque la lluvia frustró la procesión matutina, el colectivo minero respondió con entusiasmo y camaradería, transformando el evento en una experiencia inolvidable.
La alternativa a la procesión consistió en un conmovedor recorrido por la iglesia de Santa Bárbara, mientras la banda del pueblo entonaba el himno de España. A pesar de las adversidades climáticas, el espíritu festivo perduró a lo largo del día.
La jornada continuó con una misa que contó con la destacada presencia de autoridades locales, incluido el alcalde peñarriblense y representantes de la Guardia Civil. El almacén central fue testigo de un vibrante concurso de entibadores, donde las parejas del cuadro minero compitieron por generosos premios en efectivo y lámparas mineras en reconocimiento a sus habilidades.
El Colegio entregó las muñecas Nanci de Herminia Marcado, llamadas Barbara y Antolín, a la AECC Junta local de Peñarroya, contribuyendo así a obras benéficas en la sociedad.
La exposición «Tejas y Ladrillos de Peñarroya Pueblonuevo», organizada por la Fundación Cuenca del Guadiato, fue inaugurada, mostrando la rica historia y patrimonio de la región.
Antes de la conclusión del concurso, la galería minera simulada se llenó de pasión flamenca con un espectáculo cautivador protagonizado por Anabel Castillo al cante y Jesús Zarrias a la guitarra. El repertorio abarcó diversos palos del cante flamenco, culminando con un popurrí de canciones de artistas icónicos.
Hacia la tarde, la celebración se trasladó al hostal restaurante Pacheco, donde los asistentes disfrutaron de un vino español y un homenaje a los colegiados. Un variado menú que incluía surtidos ibéricos, croquetas de jamón, ensaladilla rusa, torreznitos, chipirones y solomillo fue seguido por un surtido de confitería y café. Las bebidas, que incluyeron vino tinto y blanco, cervezas, aguas y refrescos, complementaron la experiencia gastronómica.
El punto culminante del día fue la entrega de los prestigiosos Pines de Oro del Colegio de Minas a aquellos que recientemente se habían jubilado: Pedro Montero, Enrique Estepa y Alfredo Jurado. La velada concluyó con todos los presentes de pie, entonando a coro «La Canción de Santa Bárbara».
Después de estos emotivos momentos, algunos decidieron quedarse para continuar la fiesta, mientras que otros optaron por retirarse, marcando el cierre de una jornada cargada de tradición, camaradería y merecidos reconocimientos.
Es muy curioso y quizás un claro ejemplo de la decadente devoción a Santa Bárbara, que siendo titular de su Parroquia, ha pasado del camarín superior del Altar Mayor de la Parroquia, pasando por una hornacina lateral, para acabar relegada a un poyete de mármol casi desapercibida en el templo que lleva su nombre. Santa Bárbara igual que su fiesta cada día menos presente en la vida de nuestro pueblo, de su parroquia y sus hermandades.